jueves, 30 de agosto de 2012

Emociones esquivadas

Yo tengo dos besos, nunca iguales
No hay en ellos nigún secreto
Uno te besa, el otro espera
Ambos son de respeto,
para un amor que se me escapa

Puede que sí...
que todo sea una alegoría
que nada sea emblemático
que no quiera ir siempre vestido
que no me cueste trabajo permanecer en la simpatía
que puedo tener momentos de irracionalidad
que no he de creer en lo bíblico
que me gustan los besos infantiles
que una vez compré una alfombra de seda hindú
que me quiera perder en tus besos.
Puede que sea...
que la vida determine el momento del último beso.

Durante la vida nos mirámos muchas veces
y cada vez nos cuesta más dárnos a conocer

Yo aquí en esta urbe inacabada donde las grandes
palabras aún no han aparecido, busco en las miradas
un nuevo estímulo que me despierte.

Tengo la sensación que en los amaneceres no hay consuelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario