jueves, 29 de diciembre de 2011

podemos quedar un rato largo

Impresiona la prisa con la que tocámos las sensaciones.

Me seducen las palabras directas.
Las que ignoran lo superfluo.
Las que impregnan las miradas de autenticidad.
Las que se pueden digerir fácilmente.
Las que no se pierden en las falsedades.
Las que son esencia.

Me pasa siempre y no me considero más raro que otros:
no me gustan los besos que suenan en las mejillas, en los labios(en todos los labios),
en las distancias, en las pieles, en todas las partes del cuerpo...

Sugiero líneas de pensamiento que ocupen un espacio dónde todo pueda ser.

No hay comentarios:

Publicar un comentario